Esta harina que se ha convertido en la harina estrella en muchos obradores no solamente por su capacidad de dar unos panes 100% de espelta integral, sino también por su capacidad de asociarse con harinas de otros cereales como las de maíz, quínoa o sarraceno. La asociación con harinas de otros cereales se puede hacer a través de masas escaldadas de manera muy fácil y con unos resultados de gran calidad.  Además, esta harina permite desarrollar una gama de panes medio integrales asociándola con la harina de espelta blanca consiguiendo unos panes más ligeros. Pan aparte, permite hacer pastas, galletas, pizzas y se adapta tanto a trabajos en directo como en largas fermentaciones, con o sin masa madre.